Las campañas de Crowdence tienen dos conceptos básicos, el objetivo de ventas y el mínimo de fabricación. 

El objetivo de ventas es el reto que se marca el creador de la campaña y si lo cumple la campaña será un éxito, ya que obtendrá los beneficios que había estimado en la simulación de nuestro diseñador online.

Por otro lado, el mínimo de fabricación es el número de ventas a partir del cual el promotor empieza a generar beneficio por poco que sea. Desde ese punto, la campaña se fabricará y todos sus compradores obtendrán la camiseta. Tanto el precio del servicio como el beneficio por unidad son calculados al final de la campaña y se ajustan al número total de camisetas vendidas. Si vendes más del objetivo prefijado, mejoraremos los precios y ganarás más por camiseta, pero si vendes menos, también tendremos que ajustar el precio para que tus compradores puedan recibir la camiseta y no se queden con mal sabor de boca.